En 2004, la Secretaría de Educación del Distrito y Fedesarrollo acordaron adelantar un proyecto de transferencias monetarias condicionadas a la asistencias escolar para reducir la deserción escolar de los más pobres en la ciudad. El piloto consiste en la asignación de tres modalidades de transferencias condicionadas aun total de 10 mil jóvenes residentes en dos localidades de Bogotá, cuya evaluación permitirá establecer cuál es la modalidad con mayor impacto, para luego expandirla en la ciudad desde 2006.